Hoy intentaremos resolver las dudas que nos surgen cuando nos planteamos esta cuestión. Sin embargo, recordad que todo plan de alimentación debe ser revisado y aconsejado por un profesional. ¡Y no nos olvidemos de los hábitos de vida saludable como el deporte regular!

Actualmente se tiende a realizar tres comidas al día: desayuno, comida y cena. Sin embargo, es un hecho que cada vez más nutricionistas, entrenadores personales y profesionales recomiendan realizar varias comidas al día. Ahora bien, estas comidas deben estar reguladas y se tienen que cuidar las porciones de cada comida. 

Debemos tener en cuenta varios factores: 

• El número de veces en que se realizan comidas al día.
• La cantidad de cada porción. 
• El aporte nutricional de los alimentos. Es decir, la calidad de los alimentos que elegimos.
• El tipo de metabolismo de nuestro cuerpo

Existen múltiples beneficios cuando realizamos una dieta basada en 5 comidas al día: desayuno, almuerzo, comida, merienda y cena. 

• Ejercitamos más el sistema digestivo por lo que los procesos digestivos se facilitan y evitamos que nuestro sistema digestivo trabaje de forma lenta.
• Permite que el sistema digestivo trabaje menos durante las horas de descanso nocturno.
• Evitamos picar entre horas, por lo que se evita el consumo excesivo de alimentos y esos momentos de pesadez que producen.
• Ayudamos a mantener la energía durante el día.
• Evitamos la acumulación de sustancias innecesarias para el organismo, especialmente las grasas y las toxinas.

Hay que tener en cuenta que para realizar las 5 comidas al día y obtener beneficios, es necesario ajustar la cantidad de comida (ni excesiva ni escasa), de la misma manera que debe regirse por alimentos saludables. ¡Y ten en cuenta los horarios de las comidas! Es esencial mantener un horario estable y regular.